El Gobierno regional impulsa la formación específica para las empresas que se comprometan a contratar a los alumnos.

El SEF oferta un curso de soldadura industrial con compromiso de contratación que desarrolla la empresa Metalmecánicas Herjimar de Cartagena y se imparte en las instalaciones de la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (FREMM).

Un curso con compromiso de contratación ofertado por la Consejería de Empresa, Empleo y Economía Social, a través del Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF), dará trabajo inmediato a, al menos, el 40 por ciento de los alumnos que realicen esta formación en soldadura industrial para desempleados. En concreto, la consejería ha concedido a la empresa Metalmecánicas Herjimar, ubicada en Cartagena, una subvención de más de 41.500 euros para desarrollar este curso.

Así lo dio a conocer la consejera de Empresa, Empleo y Economía Social, Marisa López Aragón, durante su visita, junto al gerente de Herjimar, Mariano Jiménez, el presidente de la FREMM, Alfonso Hernández, el secretario general de la federacióndel metal, Andrés Sánchez, y el director del CIFP Arsenio Sánchez Navarro de FREMM, Ramón Muñoz, a los 17 alumnos que asisten a este curso en las instalaciones de la Federación Regional de Empresarios del Metal (FREMM).

“Esta convocatoria de cursos con compromiso de contratación que mantenemos abierta todo el año, nos permite, no solo aumentar las oportunidades de empleo de las personas desempleadas, sino también contribuir al desarrollo y competitividad de la formación a medida, para contar con la mano de obra cualificada que necesitan”, explicó la consejera.

Al menos, siete de los 17 alumnos que actualmente participan en esta acción formativa con compromiso de contratación, serán contratados por la empresa por un periodo mínimo de seis meses, que podrá prorrogarse, una vez completen su formación, prevista para el mes de mayo.

En concreto, este curso, que arrancó el pasado mes de febrero, brinda a sus participantes 490 horas de formación en la especialidad de soldadura por arco bajo gas protector con electrodo consumible, que se repartirán en 367 horas de formación en el centro y 123 de práctica en la empresa. Actualmente, los alumnos se encuentran en la primera fase del curso en las instalaciones de FREMM.

De esta manera, se ofrece a las empresas la posibilidad de obtener una subvención del cien por cien del coste para la realización de acciones formativas que incluyan un compromiso de contratación de una duración no inferior a seis meses. En ambos casos no podrá ser inferior a media jornada. Cada empresa podrá planificar esta formación de acuerdo con sus necesidades particulares y a lo largo de todo el año.

CIFP FREMM

El curso de certificado de profesionalidad de “Soldadura por arco bajo gas protector, con electrodo consumible soldeo MIG/MAG” se imparte en el CIFP ‘Arsenio Sánchez Navarro’ de FREMM y consta de 367 horas.

Dentro de su preparación, el alumnado ha pasado por el taller de realidad virtual de soldadura del CIFP FREMM, como complemento de su formación, y en los próximos días inicia su fase de formación dual de 123 horas en la empresa Metalmecánicas Herjimar.

Metalmecánicas Herjimar es la evolución de una empresa familiar que desarrolla, desde hace más de 50 años, actividades de construcción, reparación, montaje y mantenimiento para los sectores industrial, naval, ferroviario y de transporte, constituyéndose en una empresa de servicios metalmecánicos. Su estrategia se basa en la potenciación de la I+D+i, la calidad y el servicio al cliente, prestando servicios auxiliares a la industria y construcción, tanto a nivel nacional como internacional, siendo un referente en el sector en flexibilidad y niveles de atención al cliente.

FREMM lleva unos 40 años formando a desempleados, con una media en el último lustro de unos 1.100 alumnos al año y una tasa de inserción laboral de un 80% media que encuentra empleo tras formarse en el CIFP FREMM, siendo del 100% de los preparados en los talleres de soldadura. La federación empresarial viene comunicando la falta de profesionales cualificados en la Comarca del Campo de Cartagena, donde, entre otras profesiones, precisan soldadores.

 

 

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